Derecha guatemalteca insiste en concretar golpe contra Arévalo

El próximo 14 de enero asume la presidencia el candidato electo de Guatemala, Bernardo Arévalo. Sin embargo, la derecha de ese país avanza en su estrategia de golpe blando para evitar, al costo que sea, que el líder del partido Movimiento Semilla (MS) gobierne hasta 2028.

Tanto la Fiscalía – al mando de María Consuelo Porras- como el juez Freddy Orellana avanzaron, por caminos distintos, en supuestas “investigaciones” para invalidar los resultados de junio y agosto, cuando se realizaron la primera y segunda vuelta respectivamente, con resultados que favorecen a Arévalo, informa Telesur.

Por un lado, la Fiscalía entregó este 11 de diciembre al Tribunal Supremo Electoral (TSE) un informe de las “pesquisas” sobre supuestas anomalías por las que considera “nulas” el balotaje.

En este sentido, la fiscalía ya había anunciado el viernes 8 de diciembre que había detectado “irregularidades” en el escrutinio de votos de la primera vuelta electoral de junio, en la que Arévalo obtuvo el segundo lugar con 15.51 % de los votos, siendo superado por la derechista Sandra Torres (21.10%).

El canal multiestatal agrega que ese mismo viernes, la presidenta del TSE, Blanca Alfaro, dijo que los resultados de los comicios son inalterables y que Arévalo debe asumir el poder el 14 de enero.

“La Fiscalía Especial contra la Impunidad remitió a la Magistrada Presidente del Tribunal Supremo Electoral, la investigación que en materia penal ha desarrollado la fiscalía, a efecto que luego del análisis, puedan adoptar la decisión que consideren conveniente”, cita el medio.

De igual forma el Ministerio Público (MP) insiste que hubo una serie de “anomalías” en las actas finales de cierre de escrutinio en las elecciones de presidente, vicepresidente, diputados, corporaciones y diputados al Parlamento Centroamericano.

La otra investigación la lleva el juez Orellana – señalado por corrupción-, quien sentenció este lunes a dos años y medio de cárcel a un “funcionario electoral” por el supuesto caso de las firmas falsas utilizadas para la conformación del MS, el partido de Arévalo, ahora suspendido, agrega EFE.

Según informa el MP en un comunicado, el “sentenciado aceptó su responsabilidad en la comisión de los delitos”, y la pena otorgada es de dos años y seis meses de prisión.

Objetivo: Socavar el legítimo ascenso

Desde el primer momento en que se conocieron los resultados de la primera vuelta, en la que Bernardo Arévalo accedió al balotaje, grupos de poder de la derecha comenzaron a mover los hilos en el MP, liderado por María Consuelo Porras, y en el sistema de justicia para intentar dar un golpe blando, con la estrategia de invalidar los comicios, ilegalizar a MS y meter preso al ganador, un político y académico no perteneciente a la clase tradicional y corrupta guatemalteca.

En la rueda de prensa del viernes, los fiscales Leonor Morales y José Rafael Curruchiche ofrecieron resultados de una supuesta “pesquisa” que abarcó varios meses. Los agentes dijeron que las actas electorales utilizadas en los comicios “son nulas de pleno derecho” ya que “no fueron autorizadas” desde un inicio por el TSE.

“Semilla nunca ha nacido a la vía jurídica pues su constitución fue mediante acciones corruptas e ilegales”, dijo la fiscal, citada por la BBC, mientras que Curruchiche expuso que había “siete hallazgos de violación a la normativa electoral”, en términos de gestión de recursos.

Luego de atropellos a la ley, con allanamientos forzosos, abuso de autoridad y secuestro de cajas de votación, los indagadores encontraron que el TSE realizó una “compra” de un software para la transmisión de datos electorales que fue “manipulado desde el exterior” para beneficiar al MS.

Morales también enumeró una serie de supuestas alteraciones de actas por “presuntos afiliados al Movimiento Semilla”, organización que según el MP fue constituida con firmas planas y falsas.

Entre tanto, Arévalo intenta hacer valer su legítimo derecho a la defensa ante la negación de acceso al expediente por parte del juez Orellana.

Este lunes 12 de diciembre, refiere la prensa local, el mandatario electo se dirigió personalmente al despacho del juez con el objetivo de solicitar acceso al expediente del caso “Semilla”, que mantiene suspendido al partido político. Sin embargo, su solicitud fue denegada. Arévalo dijo que estas trabas impiden ejercer su derecho a la defensa, ya que le han imposibilitado 33 veces ver el folio.

Por su parte, Juan Gerardo Guerrero, abogado y diputado electo por el partido MS, dijo que espera apelar a la Corte de Constitucionalidad para que declare “la no aplicabilidad del artículo 82 de la Ley Contra la Delincuencia Organizada, que es lo que está utilizando el juez Freddy Orellana y el fiscal Curruchiche para dejarnos en suspenso en el Tribunal Supremo Electoral”.

La avanzada derechista ha provocado una fuerte reacción de sectores populares que se han movilizado en las calles pacíficamente para condenar el intento de golpe de Estado, pidiendo la renuncia de la fiscal Porras, de los fiscales y jueces, entre ellos Orellana.

El jueves 7 de diciembre, Arévalo lideró una marcha pacífica para condenar el entramado que intenta torpedear su futuro gobierno. “Vengan a caminar por la democracia, hoy marchamos en unidad por este país que va a florecer a pesar de los corruptos”, dijo el mandatario electo al iniciar la caminata desde la sede de la Corte Suprema de Justicia hasta la Corte de Constitucionalidad.

En un artículo de opinión, publicado en El País, Édgar Gutiérrez, ex canciller guatemalteco denuncia que desde 2019, Porras ha fungido como “punta de lanza del Pacto de Corruptos, una coalición informal de políticos, élites burocráticas y empresariales, más los poderosos grupos de narcotraficantes, que ha movido regresivamente las libertades civiles y políticas, desatando una feroz persecución contra la disidencia, en particular contra los operadores de justicia independientes, que ya suman medio centenar en el exilio”.

“Esta vez, la fiscal se lanzó con saña irracional contra el presidente electo Bernardo Arévalo y varios dirigentes de su partido, Movimiento Semilla. Pretende borrarlos de la vida política y los califica como “organización criminal”. Por el momento, logró congelar la personería jurídica del partido, libró órdenes de captura contra algunos de sus líderes juveniles y tiene tres causas contra Arévalo para encarcelarlo”, agrega el analista político en el escrito.

Para su plan golpista, agrega, la líder del MP “cuenta con el apoyo solapado del presidente Alejandro Giammattei (…) y se suma una mayoría de diputados —siempre que les lleguen al precio—, algunos jueces y magistrados, y oligarcas que siguen creyendo que son anónimos”.

En cuanto a la política exterior, EEUU y sus aliados – la OEA y la UE- ahora parecen cuidar sus pasos y, luego de apoyar al presidente saliente -y en un intento de parecer demócratas-, ahora le dan la espalda al asomar y aplicar sanciones. Este mismo 12 de octubre, Washington emitió medidas punitivas a 300 personalidades políticas allegadas al mandatario, por estar involucradas en casos de corrupción y pretender impedir el ascenso de Arévalo.

Foto: X del Movimiento Semilla

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