El operativo militar ruso para desnazificar a las repúblicas de Lugansk y Donetsk en el Donbás ha disparado la furia de “occidente”, región del mundo que aplicó una batería de mal llamadas “sanciones” en contra de Rusia, con el fin de socavar al Kremlin.
Estas medidas coercitivas también fueron dirigidas a Bielorrusia, por su apoyo a Moscú. Las mismas afectan a todos los ciudadanos de ambos países, incluidos los deportistas a quienes se les ha vetado e impedido participar en eventos de gran escala.
Ante ello, el Consejo Olímpico de Asia (OCA, por sus siglas en inglés) pidió facilitar la participación de los atletas rusos y bielorrusos en competiciones en ese continente, informa Prensa Latina (PL).
Al término de la XI Cumbre del Comité Olímpico Internacional (COI), la entidad recordó que mantendrá el veto y censura a los deportistas de las referidas nacionalidades pero que “considerará” la propuesta de Asia.
El comunicado final reconoció que se abrió un intenso debate sobre si, pese a las sanciones, los deportistas podrían participar aun en competiciones deportivas internacionales aunque sea sin defender su bandera, himno y colores alusivos a sus nacionalidades.
Asistentes a la cumbre aseguraron que el hecho de que algunos gobiernos decidan qué deportistas pueden o no participar es “una interferencia inaceptable en la autonomía de las organizaciones deportivas y en su neutralidad política”, cita PL.
En ese sentido, el presidente en funciones del OCA, el indio Randhir Singh, declaró que en ese continente ya no existen las razones que justifican esas “medidas”.
El OCA se ofreció a facilitar la participación de atletas de ambas naciones en competiciones en Asia bajo su autoridad, respetando las “sanciones” vigentes por el conflicto armado Rusia-Ucrania.
Según reporta el medio cubano, los representantes de las federaciones internacionales recibieron con beneplácito la propuesta de la OCA y quedaron en que cada una debería evaluar si continúan o no con la censura.
La decisión se discutirá en la próxima consulta del COI a los comités, representantes de los atletas y federaciones internacionales.
La consideración asumida en esta cumbre es un paso para levantar el ilegal veto que pesa sobre estos deportistas. A finales de noviembre, el presidente del COI, Thomas Bach, llamó a las federaciones internacionales deportivas a no ceder ante Moscú y Minks.
“Las sanciones contra los gobiernos de Rusia y Bielorrusia se mantienen y seguirán en vigor. Debe permanecer vigente la recomendación de que las federaciones internacionales no reconozcan sus competiciones deportivas y el veto a mostrar símbolos nacionales de esos países en eventos deportivos”, habría pronunciado Bach en un mensaje.
En esta persecución contra Rusia y Bielorrusia están varios gobiernos “occidentales” y organizaciones, como la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) que expulsó unilateralmente a los rusos de todos los torneos internacionales y por ende de la competición por la Copa del Mundo. De igual forma, se excluyó a los clubes rusos de los juegos de la Unión de Federaciones Europeas del Fútbol (UEFA, por sus siglas en francés), entre ellos la famosa Liga de Campeones.
Los tenistas rusos y bielorrusos también son blanco de medidas similares en varios torneos y abiertos en los que fueron vetados.
Foto: COI
