Para combatir los crímenes de lavado de dinero y narcotráfico, heredado de décadas de gobiernos oligárquicos, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció este miércoles 1 de septiembre en Bogotá, un plan que busca acabar con organizaciones vinculadas a estos delitos.
Durante el Consejo de Seguridad Humana Integral de Bogotá, el presidente explicó que el operativo articulará la inteligencia y contrainteligencia.
“El narcotráfico no tiene más objetivo (…) que hacer dinero; y el dinero se hace en el lavado de activos y no lo hace gente uniformada, ni con fusiles”, afirmó Petro, citado por Prensa Latina (PL).
“Para desactivar ese engranaje del gran narcotráfico, que es el lavado de activos, que incluye actividades inmensas de contrabando” es necesario hacer un énfasis fundamental en la articulación de los cuerpos de inteligencia del Estado, ya que estas mafias “están en oficinas y puede ser gente muy poderosa”, detalló Petro.
Explicó que este plan no vulnerará los derechos de los ciudadanos.
El gobernante dijo que la finalidad es “combatir las grandes operaciones de lavado de activos y la corrupción, porque las grandes operaciones de lavado de activos generalmente se realizan con funcionarios del Estado”.
Estos operativos se hacen “con software, análisis de redes, inteligencia artificial, incluso, se hace con capacidad cerebral más que militar”.
Pidió articular los organismos como la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, la Dirección de Inteligencia Policial y la Unidad de Información y Análisis Financiero.
Lamentablemente, Colombia ha sido por décadas el mayor exportador de cocaína en el mundo. El destino de la droga es Estados Unidos y Europa, regiones en las que más se consume este y otros narcóticos, ante la inacción de los gobiernos.
Oligarquía y narcotráfico
En agosto del 2021 – bajo el mandato de Iván Duque-, un informe de Naciones Unidas develó que en el 2020 se había elevado la producción de cocaína como nunca antes.
El estudio explicó que por cada tonelada de hoja de coca, se extraían en aquella oportunidad 2,14 kilos de pasta base de cocaína. En 2016, comparaba la ONU, se extraían 1,87 kilos, refiere la BBC.
El organismo también estima que “en 2020 se produjeron 1.010 toneladas métricas de cocaína pura, lo que comparado a las 936 toneladas de 2019 da un aumento del 8%”, cita el medio británico.
Duque es aliado del expresidente Álvaro Uribe, político que guarda, desde hace muchos años, lazos con grandes grupos de poder que están vinculados con enormes redes del narcotráfico y paramilitarismo.
Al igual que Uribe, Duque ha sido señalado de sostener relaciones con estas redes de lavado de dinero, que, según varios medios, financiaron su campaña presidencial en 2018.
Para el 2020 se divulgó un audio – aparentemente grabado en época electoral- en el que se escucha al ganadero José Guillermo Hernández, mejor conocido como “Ñeñe” Hernández, pedir a una mujer “buscar una plata para pasar bajo la mesa para soltarla en los departamentos”.
El “Ñeñe” Hernández fue asesinado en Brasil en circunstancias bastante extrañas. Tiempo después se conoció que tenía una investigación por homicidio y se supo que sostenía una fuerte relación con Marcos de Jesús “Marquitos” Figueroa, un contrabandista de gasolina y narcotraficante con mucho poder en César y La Guajira (departamentos ubicados en el norte de Colombia). El “Ñeñe” Hernández – amigo y socio de Duque- figuraba como brazo político y financiero de las organizaciones criminales de “Marquitos”.
Duque ha demostrado ser el mejor alumno de su maestro Uribe, quien, desde hace más de 30 años ha estado estrechamente relacionado con mafias de narcóticos, como el Cartel de Medellín, que lideraba el infame traficante Pablo Escobar.
Esta relación era conocida, desde hace mucho tiempo, por EEUU y sus organismos de inteligencia, tal y como se develó en un memorando divulgado por el Archivo Nacional de Seguridad del país norteamericano.
