La precipitada destitución – considerada por muchos como golpe de Estado- y violenta detención del expresidente de Perú, Pedro Castillo, ha generado descontento social y manifestaciones de miles de personas en las calles de Lima, la capital, y otras ciudades peruanas.
Telesur informa que movimientos sociales, partidarios del exmandatario, como el grupo Nuevo Perú, salieron a las calles para pedir nuevas elecciones, la instalación de una Asamblea Nacional Constituyente, y en contra de la nueva presidenta Dina Buloarte, a quien consideran traicionera.
Lucía Alvites, socióloga y militante de Nuevo Perú, hace un llamado a las fuerzas de izquierda para la defensa de la democracia y condenó la llamada “tregua” de la ahora mandataria Buloarte, ya que considera que su gobierno será títere de la derecha agrupada en el Congreso.
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“Los sectores golpistas, basados además en discursos clasistas y racistas que hacen recordar los tiempos de la colonia, buscan quebrar la voluntad popular”, alertó en declaraciones a Telesur.
La militante añadió que Buloarte “esconde en la práctica un pacto con los sectores golpistas que han venido maniatando a la democracia, y que han venido dinamitando lo poco que queda de ella”.
En este sentido, considera que el conflicto va más allá de la destitución de Castillo. “Es momento de salidas de fondo, de salidas estructurales. Esta crisis es sistémica y necesita salidas responsables, populares y constituyentes para cambiar estas reglas de juego que están agotadas”.
“En los últimos años, lo que han hecho estos sectores, que además son los grandes responsables de la crisis porque son los que han administrado el Estado en las últimas décadas, es restarle el poder al pueblo”, advirtió la vocera de Nuevo Perú, quien insistió en el llamado a la unidad de las fuerzas progresistas de ese país.
El canal multiestatal informa que se han registrado masivas movilizaciones en departamentos como Arequipa, Cusco, Ayacucho y Cajamarca, cuna de Castillo. En esas regiones, organizaciones sociales han hecho llamados para que la gente se mantenga en las calles contra la destitución y a favor de la liberación del expresidente.
Otros medios añaden que en la capital se han registrado fuertes represiones de efectivos militares en contra de manifestantes a favor de Castillo.
La agencia AFP reporta que miles de personas llenaron este jueves 8 de diciembre diez cuadras del casco histórico de Lima, con consignas como “¡Pedro Castillo, Perú está contigo!” y “¡Si no hay liberación, habrá revolución!”. Esta manifestación era fuertemente “custodiada” por la policía que al final terminó lanzado gases lacrimógenos y deteniendo a sus participantes.
“Estoy marchando por defender a mi presidente Pedro Castillo, que lo han vacado (destituido) injustamente. Han hecho lo imposible para sacar a Castillo, desde el momento que ha entrado no lo han dejado trabajar”, dijo al medio francés, la ciudadana Mery Colque.
“Vivimos en un golpe de estado decretado por el Congreso golpista. No puede ser que un grupito de 100 personas saque a un presidente elegido por millones”, agregó la manifestante Ana Zevallos.
Estas concentraciones y marchas se han dado desde el primer momento que el exmandatario fue removido el miércoles pasado. Primero frente a la sede del Congreso y luego a pocos metros de la sede de la prefectura de Lima en donde Castillo estuvo detenido. “Cierren el Congreso, nido de ratas”, se leía en una pancarta que levantaba una multitud frente a la estación policial.
Castillo, líder sindical, campesino comunal y educador de 53 años, llegó al poder en 2021 al conquistar la mayoría de votos frente a la derechista Keiko Fujimori, quien salió derrotada por tercera vez.
En 16 meses en el poder, el entonces presidente – que no guarda vínculos con élite alguna- fue acorralado y acosado por la derecha de ese país, agrupada tanto en el Congreso como en otras instancias del Poder Público. En su breve período afronto tres pedidos de vacancia desde el Legislativo y un sinfín de denuncias, sin sustento, de supuesta “corrupción”, con el fin de sacarlo de la Presidencia.
Frente a esta presión, Castillo disolvió el Congreso y llamó a un gobierno de emergencia nacional, paso que le costó el cargo. Sin mucho contratiempo, la derecha ordenó su detención y prisión en el penal de máxima seguridad de la Dirección de Operaciones (Diroes), en donde cumple condena el expresidente Alberto Fujimori por delitos de lesa humanidad.
Desde entonces, Castillo ha recibido el apoyo de varios líderes y movimientos tanto de Perú como de América Latina. Entre ellos, el expresidente boliviano Evo Morales, el mandatario venezolano, Nicolás Maduro; el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador; la mandataria hondureña, Xiomara Castro de Zelaya; y el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, entre otros.
Foto: Twitter de Informa3Chile
